Una vez que estas vías y las conexiones están formadas y fortalecidas, muchos de estos niños que están en grados superiores todavía necesitarán tutoría para fortalecer sus habilidades lectoras basadas en la fonética hasta que su cerebro derecho y el reconocimiento visual de las palabras se vuelva más fuerte. La tutoría basada en la fonética por lo común solo se necesita por una hora dos veces a la semana. Primero se fortalece la conciencia fonémica de los niños (es decir su habilidad para escuchar los sonidos separados de una palabra dada). Luego los niños necesitan ganar o alcanzar un entendimiento de las familias de las palabras (sat, mat, cat, etc.) y de los diferentes sonidos que las vocales pueden hacer dentro de las palabras. Finalmente estos niños necesitarán aprender las reglas de deletreo que determinan cuales sonidos hacen ciertas vocales dentro de una palabra dada (para el idioma inglés).
Todas estas actividades fortalecen el cerebro izquierdo de los niños para la lectura basada en la fonética. Aún cuando estos niños de grados superiores se les hubieran enseñado familias de palabras y fonética en el primero y segundo grado, necesitarían repetir sus habilidades de lectura, dado que su lado izquierdo del cerebro probablemente no estaba suficiente desarrollado para aprender esta habilidades cuando estaban en los grados inferiores.
Si las enseñanzas de la tutoría no permanecen en su mente de una semana, a otra, entonces yo puedo pensar que sus vías de procesamiento sensorial todavía no están completamente abiertas y/o desarrolladas, entonces la tutoría se detiene o disminuye hasta que los niños tengan más terapia de movimiento y/o craneal para abrir completamente sus vías.
En resumen, la lectura debería enseñarse en las escuelas solamente hasta que los niños hayan desarrollado el lado izquierdo de su cerebro para que la lectura esté basada en la fonética, y también cuando hayan desarrollado vías de integración bilateral (conectando los lados derecho e izquierdo del cerebro). Esto permitirá que los niños lean fonéticamente utilizando el lado izquierdo de su cerebro mientras simultáneamente crean imágenes mentales internas en el área frontal del lado derecho de su cerebro (y aumentar y analizar estas imágenes visuales por medio del procesamiento del lenguaje en el área frontal del lado izquierdo de su cerebro también). Los niños que pueden simultáneamente pronunciar fonéticamente las palabras utilizando el lado izquierdo de su cerebro mientras crean imágenes mentales en el área frontal del lado derecho de su cerebro, podrán leer fácilmente y simultáneamente crearán imágenes visuales en sus mentes relacionadas al contenido de lo que están leyendo.
Ellos serán capaces de discutir o escribir acerca de lo que han leído utilizando sus propias palabras por que pueden volver a ver las imágenes mentales y las escenas que han generado en su mente mientras están leyendo.
Por lo común las escuelas y los padres pueden apoyar el aprendizaje de los niños al servirles comidas sanas rica en proteína, grasas de buena calidad (especialmente ácidos grasos omega-3 y aceite de coco), frutas frescas y vegetales y eliminando comida que esté altamente procesada, azúcar procesada y aceites parcialmente hidrogenados, grasas trans que ocurren cuando se cocinan o fríen comidas en aceites vegetales (ejemplo: aceite de maíz).
El dormir adecuadamente incrementará el porcentaje del movimiento rápido de los ojos o del dormir en MOR. La carencia de sueño lleva a la disminución del sueño MOR. y por tanto a la disminución en la consolidación de las imágenes visuales de corto plazo a las imágenes visuales de largo plazo, en función a las lecciones del día anterior. El limitar de manera extrema la exposición a la pantalla (T.V., videos y juegos de computadora) y eliminarlas por completo en las noches de escuela dejará libre la mente de los niños para hacer sus propias imágenes, así mismo su mente no estará estresada al tratar de comprender y procesar las imágenes que comúnmente son violentas en la pantalla y la memoria visual de los niños podrá formarse porque el aprendizaje en la escuela no tendrá que competir o ser diluido por las imágenes que rápidamente aparecen en las pantallas. El ritmo y rutina regular al comer y dormir así como la actividad física, promoverá un sistema nervioso más integrado y relajado para el aprendizaje. Además los niños no pueden aprender y no pueden formar vías neuronales fácilmente cuando su sistema nervioso está experimentando estrés.
a los niños pequeños a escribir, leer y deletrear y requerir de ellos que hagan pruebas estandarizadas especialmente en computadora antes de aún estar listos en su desarrollo para leer y escribir estresará su sistema nervioso autónomo y por lo tanto volverá lento el desarrollo de su cerebro, de su cuerpo y de su mente. Además los niños que son presionados a leer y escribir antes de estar listos neurológicamente mostrarán disgusto para leer y escribir y no disfrutarán aprender o aún ir a la escuela. Si insistimos en presionar a leer, escribir y deletrear antes de que la mente de los niños o sus sistema neurológico esté totalmente desarrollado, continuaremos creando una epidemia de problemas conductuales de atención y de aprendizaje en todos los niños, especialmente en los varones.
El primer grado es el momento para introducir muchos dibujos de forma y para aprender la forma de las letras mayúsculas relacionándolas con imágenes. Debido a que el centro de la lectura (el área del lóbulo frontal) en el cerebro derecho puede visualizar letras individuales como imágenes, tiene sentido primero enseñar la forma de la letra y su sonido correspondiente al relacionar la forma con imágenes que los niños puedan entender y dibujar. Por ejemplo: la letra “M” puede ser representada por dos picos de montaña cubiertas con una capa de nieve con un valle en medio. Como maestros podemos decirle a los niños que el sonido de la “M” es el primer sonido que escuchamos en la palabra Montaña. Otro ejemplo puede incluir dibujar un rey desde la letra “R”, un conejo desde la letra “C”. Lo que no hace sentido en el desarrollo es esperar que los niños solamente memoricen la forma abstracta de una letra como “F” o memoricen frases con la letra “F” como en la palabra Foco, “B” como en la palabra bote o “S” como en la palabra sapo. Estas palabras no tienen sentido visual para el centro de lectura en el cerebro derecho. La letra S no se parece a un sapo, la letra B no se parece a un bote y la letra F no se parece a un foco. El número puede ser enseñado relacionándolo tanto como la cantidad que representa como con los objetos (ejemplo: usando piedras para contar o imágenes de objetos que los niños activamente cuenten). También en el primer grado podemos hacer que los niños practiquen dibujar formas cursivas, como dibujar pequeñas letras minúsculas en una línea repetitiva (por ejemplo: dibujando la forma cursiva de la c una y otra vez para representar la cresta de las olas en un océano). Los niños pueden también copiar letras de molde y números desde un pizarrón y dibujar las letras utilizando sus dedos (por ejemplo: la letra M representando dos montañas y hacerlo sobre la espalda de uno y otro o sobre arena). Sin embargo no esperemos de ellos que dibujen fácilmente los números y letras de memoria, dado que todavía mostrarán regresiones si su sistema propioceptivo aún no está completamente desarrollado. He aprendido que es más difícil para los niños escribir palabras cursivas de una manera fluida durante el primer grado dado que las vías de integración bilateral están todavía desarrollándose. Sin embargo los niños disfrutan dibujar estas formas cursivas en los ejercicios de dibujo de forma y más tarde se verán sorprendidos y disfrutarán que esas mismas formas se pueden aprender para escribir palabras en cursiva y no solamente en letra de molde. Empezando en 2º y 3er grado, muchos de los niños habrán desarrollado su sistema propioceptivo y podrán conectar el lado derecho e izquierdo de su cerebro, por lo que formalmente se les puede enseñar a escribir en cursiva, leer fonéticamente y deletrear sin desarrollar problemas de atención o de aprendizaje. Por lo tanto, es tiempo de quitar los escritorios de los kinders y preescolares. Nuestros preescolares y kinders necesitan llenarse de programas que consistan en juego y muchas actividades de integración sensorial que fortalecerán los movimientos motores finos, las habilidades motorasvisuales, las habilidades de escucha, el equilibrio, el tono muscular y la propiocepción; también fortalecerán las habilidades sociales y emocionales y más allá, la capacidad imaginativa y el desarrollo de imágenes al promover el juego o mostrando historias visualmente utilizando marionetas y títeres y contar muchos cuentos y leerles muchos libros (inicialmente con imágenes representativas de cualidades morales, de bondad, verdad y belleza).
Actividades como escalar, correr, brincar con ambos pies y de uno en uno, caminar en una barra de equilibrio, jugar, hacer rondas, cantar, cachar, hacer actividades domésticas que tengan sentido, pintar, colorear, hacer juegos de aplausos, de cuerda, cortar con tijeras, tejer con dedos, fortalecerá la mente de los niños para el aprendizaje. Los niños necesitan estos movimientos saludables, armoniosos, rítmicos y no competitivos para desarrollar la conexión entre su cerebro y su cuerpo, lo que más tarde liberará su mente para el aprendizaje, para la resolución de problemas y pensamiento creativo. Porque son estos movimientos de nuestro cuerpo y nuestro amor por el aprendizaje lo que crea vías neuronales fundamentales para liberar nuestra mente, para leer, escribir, deletrear, hacer matemáticas, resolver problemas y lo más importante, para un pensamiento imaginativo y creativo.
Por Susan R. Johnson, MD